miércoles, 7 de noviembre de 2012

Sentimientos correspondidos.

Tras tantas lágrimas, tanto dolor, tanta desesperación por fin te encontré. Cuando creía que mi corazón no podría volver a amar, que ya había perdido la razón de existir y que no me quedaba nada por lo que luchar, apareciste tú. Eres mi ángel, mi salvador. Me has dado todo lo que nadie ha podido darme, y me has hecho sentir la persona más feliz del mundo. Ahora todo el dolor no es más que un vago recuerdo de un pasado que solo me sirvió como aprendizaje, para que el día que aparecieras, supiera que eres el amor de mi vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario